miércoles, 14 de agosto de 2013

PROCESOS EXTERNALIZADOS, ¿FACILITADORES O SOCIOS ESTRATEGICOS?



El avance y optimización de los procesos en las diversas industrias, el requerimiento de ser más eficientes cada día, y la necesidad de generar actividades algunas veces muy específicas o de alto riesgo, ha generado que actualmente las organizaciones externalicen alguno o la mayor parte de sus procesos, generando un mercado paralelo de proveedores externos integrados por procesos de contratación y/o subcontratación, con la consecuente pérdida de los mecanismos de supervisión y control
Sin entrar en mayores profundidades, normalmente los llamados a licitación para generar y materializar diversos proyectos, requieren de una serie de exigencias legales y contractuales que normalmente “motivan” a que las empresas licitantes interesadas, procedan a generar procesos de subcontratación para complementar la oferta de servicios y de esta manera presentarse con un amplio abanico de soluciones al mandante.
En la etapa del proceso en que se presenta la oferta y su documentación de respaldo, es donde se deben generar los primeros mecanismos de control relativo a que lo que se está presentando, es lo que realmente se tiene disponible para utilizar en el proyecto.
Bajo este concepto, me focalizaré en el grado de preparación y respuesta que debieran tener las empresas interesadas en el proyecto para cumplir con lo requerido por el mandante.
Normalmente el requerimiento de presentar Planes de Continuidad Operacional y/o Planes de Continuidad de Negocio, son cumplidos a través de un documento que incluye políticas, lineamientos, procesos y recursos, entre otros temas. Ante este respaldo documentario y por el hecho de no ser relevante para el desarrollo del proyecto, éste pasa a constituir para el mandante, un check de aprobación pero no de validación y certificación; en el fondo, el poder contar con una validación de que lo que está presentando el tercero como una Plan de Continuidad, cumpla realmente con lo que se encuentra indicado en el documento.
Ejemplos de casos reales existen en distintas industrias, y que quedan al descubierto por ejemplo, cuando un ente regulatorio revisa los procesos e incluye a los terceros; cuando se requiere poner a prueba el Plan de Continuidad de la empresa (normalmente genera resistencia en el tercero); o cuando se dispone del desarrollo de una auditoría interna o de certificación por parte el mandante.
Por esta razón y con la finalidad de mantener o recuperar oportunamente la continuidad, es aconsejable que cada empresa revise y valide que lo que está declarando el tercero en su Plan de Continuidad sea real, alcanzable y se pueda activar de manera simple y rápida.
Por este motivo es fundamental tener una mirada más estratégica en Continuidad Operacional o de Negocios, haciendo que los planes de continuidad de los terceros, se encuentren integrados y articulados con la planificación de la empresa, de manera que respondan coordinada y eficientemente, asignando los roles y responsabilidades respectivos en toda la línea organizacional desde la respuesta directa hasta el nivel de Dirección de ésta.

En conclusión, para las empresas que tienen externalizados sus procesos, les sugerimos una revisión, validación e integración de los planes de continuidad de los terceros al Plan Corporativo.

miércoles, 13 de marzo de 2013

ABUSO SEXUAL AL INTERIOR DE ESTABELECIMIENTOS EDUCACIONALES

CONTENCION DE UNA CRISIS CONOCIDA


Avanzado el año 2013 e iniciado el período escolar, nuevamente comienza la “normalidad” en la vida de cada familia, traslados, tareas, reuniones, actividades escolares; etc. Todas estas actividades, van completando la agenda diaria tanto de los padres y apoderados, como la de los establecimientos educacionales.

Conjuntamente con esto, emergen temas que han sido agenda noticiosa como abusos y/o violaciones, hechos que en definitiva,  involucran progresivamente a más y más establecimientos educacionales en casos de diversa complejidad, volviendo a aparecer el temor a si los niños hoy se encuentran seguros y protegidos al interior de cada aula.

Lamentablemente debemos enfrentar y asumir que existe una realidad incómoda, oculta y en algunos casos muy sórdida, relativa al abuso sexual de escolares, y que querámoslo o no, no es excluyente a ningún establecimiento de Chile, la región o a nivel global.

Dada esta premisa, es razonable formularse la siguiente pregunta  ¿Qué es necesario hacer cuando estamos frente a un caso que afecta a nuestra comunidad  escolar?

En el desarrollo de nuestras experiencias asesorando en este tipo de casos, hemos podido detectar que los sentimientos de impotencia, rabia, ira de padres y familiares directos; van  cambiando en deseos de venganza, y que en el mejor de los casos, esto se traduce en exigencias en la aplicación de justicia. En desconfianza, en el profesorado, en la dirección del colegio, y en sus protocolos para evitar o contener  estos hechos. Y la comunidad en general, vive una inevitable y dolorosa decepción.  en especial, de los mismos padres, por no haber generado las instancias de comunicación con sus hijos o simplemente el no haberse dado cuenta de que algo estaba sucendiento, características que en definitiva, no hace más que hacer visible la crisis, y que esta situación sea un episodio emocionalmente muy traumático.

De esta manera y con la finalidad de entregar información veraz y oportuna a los padres y apoderados, entregar lineamientos claros del proceso que se desarrollará, sugerimos basar el manejo y gestión de la Crisis, bajo mirada de los siguientes objetivos:

·         Proponer un modelo de respuesta inmediata, que permita contener, gestionar y administrar la actual crisis en todos sus ámbitos

·         Facilitar el manejo comunicacional del establecimiento afectado, ante la Comunidad Escolar, los medios de prensa y la comunidad local/regional

·         Permitir un proceso de asistencia, contención y recuperación de  las víctimas y sus familiares,  y de la comunidad en general

·         Colaborar en el proceso de recuperación de las confianzas de parte de los padres,  apoderados, profesores y comunidad

 Lo principal es lo que denominamos: “El Hacerse Cargo”, y no esconder la cabeza (Modelo Avestruz) ante esta situación. Esto si bien es cierto es algo incómodo, no debemos olvidar que las Crisis son una oportunidad de salir fortalecido y la posibilidad de demostrar el fuerte y real compromiso de la dirección  del colegio afectado, ante eventos de esta naturaleza. Lo anterior aportará directamente en elproceso de recuperación y sanación de las víctimas.

Ahora y con la finalidad de desarrollar un trabajo más planificado, sugerimos las siguientes Líneas de Trabajo, en las que deben desarrollarse actividades que permitan ir generando acciones tendientes a hacerse cargo de las necesidades y requerimientos propios del proceso. Estas son:

Víctimas: Identificación y levantamiento diagnóstico de las víctimas afectadas directamente y en 2da línea (Alumnos, apoderados y profesores)

Familiares: Recuperar confianzas a través de trabajo de apoyo psicológico y elaboración de plan de trabajo integral y conjunto (Dirección, Profesores y Padres y Apoderados) 

Autoridades: Establecimiento, contacto y comunicación fluida y transparente con autoridades de gobierno (Alcalde, gobernador, Seremi de Educación, Seremi de Trabajo)

Comunidad: Comunicación alineada, permanente y fluida con la comunidad interna (Colegio), y oportuna con la comunidad externa (Prensa y Comunidad de la ciudad)

Recursos: Establecimiento y definición de recursos a signar al programa, considerando que son eventos traumáticos que requieren de tiempo de recuperación y sanación a través de Psicólogos, psicopedagogos, orientadores, otros profesionales

Investigación: Disponer de manera controlada, oportuna y transparente, de toda la información histórica y actual, como de antecedentes personales, que permita apoyar el proceso de investigación

Legal: Propiciar e impulsar las correspondientes acciones  judiciales que permitan la obtención de condena de o los responsables de estos abusos, siendo parte presente e integral del proceso judicial.

Una vez analizadas estas Líneas de Acción y trabajo, así como  generadas y acordadas las actividades y personas que permitirán el desarrollo de cada una de ellas, debe generarse un Programa de Trabajo, que considere a lo menos:

Diagnóstico: Levantamiento y análisis de información relevante

Programa: Presentación Plan de Trabajo, Integración de profesionales expertos, Desarrollo y monitoreo de Actividades

Plan de Trabajo: Control de avance (recuperación emocional), Recuperación de la Continuidad (Normalidad), Reposicionamiento de Valores e Imagen

Este Programa debe considerar e incluir a las víctimas y sus familias, profesores y administrativos, padres y apoderados, y por último, la comunidad en general

Tomando como base lo indicado anteriormente, sabemos que los establecimientos afectados, podrán responder de manera solidaria y responsable, ante la crisis que está enfrentando.

Reconocemos que son procesos dolorosos, complejos y a veces muy largos que van mermando el ánimo y las fuerzas por llegar a esclarecer verdades y recuperar confianzas. Pero estamos conscientes que es necesario hacerlo y que debe existir un compromiso único e indeleble, muy particularmente con las víctimas y sus familiares, así como con la comunidad escolar y con el país.